El Dragón Chino saluda con un "Salam Malecum" a su nueva cueva en África

AsiaInspection, la empresa especializada en Control de Calidad y Servicios de Inspección, Auditoría y Test de Laboratorio para empresas importadoras, y que hasta ahora venía trabajando en el continente asiático, abre delegaciones en Marruecos y Túnez

La razón de dicha expansión se debe a que estos países están comenzando a hacer competencia a las factorías chinas, ya que cada vez tienen más peso como fabricantes y apenas existen controles de calidad o de abusos a los trabajador@s

Madrid, 26/02/12. China, el país conocido como la “Fábrica del Mundo” puede que cambie su nacionalidad por la africana. Y es que AsiaInspection, la empresa especializada en Control de Calidad y Servicios de Inspección, Auditoría y Test de Laboratorio para importadores de todo el mundo http://www.asiainspection.es/noticias, atenta a los cambios geográficos que se están produciendo con los fabricantes, acaba de poner su pica en dos mercados, como el de Marruecos y Túnez y desde donde también se dará soporte al Norte de África. “En los últimos 5 años muchas de las factorías que había en China se han trasladado a dichos países con el fin de estar más cerca del continente europeo y de los importadores. Con esta fórmula se acortan los plazos de entrega -si el encargo se hace en China se necesita un mes- así como el gasto en aranceles y aduanas”, explica Alex Makow, Director General para España, Italia y Portugal de AsiaInspection. “Por ello hemos visto determinante abrir dos delegaciones desde las que dar nuestros servicios”.

A partir de ahora la presencia de AsiaInspection en el Magreb permitirá que los importadores tengan la tranquilidad de que van a recibir el producto que se le encargó a la fábrica en su día así como que no se produzcan abusos a los trabajadores como los que hasta ahora han estado apareciendo en los medios de comunicación. “En esta parte del planeta, al igual que ocurre en muchas ocasiones en
China, las jornadas laborales llegan a ser de hasta 12 horas con el fin de poder cumplir con la demanda de las necesidades de los consumidores europeos. Dichos países ofrecen una mano de obra muy barata y casi siempre femenina”, recalca Alex Makow, Director General para España, Italia y Portugal de AsiaInspection. “Los mismos datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) dicen que por ejemplo en Marruecos, donde hay unas 2.000 fábricas, se paga la hora a 0,54 euros, el 69% de los empleados son mujeres y llegan a realizar agotadores jornadas de hasta 16 horas”.